12.24.2012

Mis "must have" del progresivo mexicano


Y bien, ha llegado la hora de hacer un recorrido por lo que para mí, es de lo más granado del rock progresivo mexicano, y todas sus vertientes, desde las más sanas, hasta las más bizarra. La verdad es que listado no tiene ningún orden determinado, sino que simplemente se trata de un fresco bastante pagano de mis gustos por la música más chida del país azteca, así es que disfruten de esta selección...

0.720 ALEACIÓN
Banda que sacó un solo disco (homónimo) y que después tuvo una placa póstuma. Aparecieron en plena era post-terremoto de 1985 y nos regalaron una hermoso álbum que mezcla el folk de raíces mexicanas, algo de Canterbury y sonidos españoles e italianos atravesados por delicados y magníficos toques sinfónicos. Un deleite para cualquier oído progger.



BANDA ELÁSTICA
Si existe un epítome del Rock in Opposition mexicano y latino, son estos chicos liderados por Guillermo González y Rosino Serrano nos han regalado seis placas de exquisita factura, que navegan entre lo más prolijo de Henry Cow, los desfases mentales de Frank Zappa, los brillantes arreglos en bronces de Miriodor y una paseo que va desde momentos de Univers Zero a Etron Fou Leloblan. Una banda que merece ser escuchada por todo aquel que se diga fanático del RIO y de la vanguardia más desatada.



AMBIENTE
Otra interesante y nueva propuesta mexicana proviene de esta banda post rock con harta influencia de Explosions in the Sky y Mono. Si no me creen, visiten su sitio en donde podrán escuchar su EP del 2009, simplemente titulado A.

CARLOS BELTRÁN
Un sólo disco solista sacó Beltrán, uno de los pioneros del género electrónico no sólo en México sino que también en toda Latinoamérica. Se trata de Jericó, publicado originalmente en 1987 y que se convierte, con el paso del tiempo, en una joya del progresivo de todas las épocas en este lado del mundo. Un verdadero "must have".



DECIBEL
Otro de los epítomes del RIO no sólo en México, sino que en todo este pedazo de tierra llamado Latinoamérica es esta banda liderada por el teclero Carlos Robledo. Sus inicios se remontan a mediados del los 70 y aquel legendario disco del 78, titulado magistralmente como El Poeta del Ruido es una pieza clave para comprender el curso de la música alternativa azteca. Ojo con Decibel y sus diferentes formaciones, las que han perdurado hasta los inicios de este siglo, porque grandes músicos han pasado por la banda, entre otros, Alejandro Sánchez, que más tarde formará otra de las grandes bandas de las que hablaremos en este posteo, Nazca.

Con influencias que parten de lo más granado del avant garde de los 70, pasando por la música de cámara, el ritmo endemoniado de Magma y toques del más desfachatado prog italiano, Decibel se levanta a estas alturas como uno de los hitos de la música alternativa hecha con fuego en el cuerpo.



CABEZAS DE CERA
¿Qué decir de esta banda? Mauricio Sotelo y sus muchachos han construido desde 1995 una de las más sólidas, eclécticas y singulares carreras musicales del continente. Con influencias que proceden desde el folclor mexicano, pasando por el jazz, el prog sinfónico, el avant garde y una tremenda gama de influencias, estilos y sonidos experimentales, CDC es uno de los proyectos más innovadores de las últimas dos décadas y merece, sin dudas, un espacio preferencial en el panteón de la música alternativa.

ICONOCLASTA
Uno de los sonidos progresivos más singulares, únicos y originales de México proviene de los que esta banda hizo durante sus, aproximadamente, primeros diez años de carrera, aunque sus tres primeros álbumes, Iconoclasta (83), Reminiscencias (85) y Soliloquio (87) bien pueden ser una trilogía tipo alma mater para cualquier banda que quiera enterarse de hasta dónde puede llegar el sinfonismo en el rock progresivo latinoamericano. Un regalo de los dioses mayas para los oídos de este nuevo siglo.



ÁGORA
No puedo dejar pasar en esta ocasión a la que quizás, es la mejor banda prog metal mexicana. Al menos dos de sus discos, son piezas de peso, notables en todo sentido de la palabra: Zona de Silencio (2008) y Regresa al Vértigo (2011). Claro está que en toda su discografía se puede sentir el pulso de Dream Theater, pero estos cabronazos han sabido imprimirle un sello propio a sus producciones y vaya que han logrado concentrar en sus placas un sonido sumamente poderoso, plagado de virtuosismo y con un sentido prog sumamente interesante.

ELFONIA
Más allá de la mezcla de estilos y géneros que nos ofrece esta banda en sus dos discos editados a la fecha, aquí lo que eleva el alma y hace sangrar los oídos de placer, es la voz fenomenal de Marcela Bovio, así es que limítense a escuchar, mortales.



CAST
Por lejos, mi banda mexicana de prog sinfónico favorita. Una larga y consistente discografía avala la carrera de este grupo que en más de quince discos ha sabido mezclar sonidos propios de México, una fuerte influencia del progresivo de los 70 y constantes ráfagas de neo prog, logrando así generar episodios épicos y electrizantes que conmoverán a cualquier fanáticos del progresivo más fastuoso y ambicioso.



NAZCA
A mediados de los 80, Alejandro Sánchez (ex Decibel) y Carlo Nicolau fundaron esta agrupación que sacó apenas dos discos de soberbia factura. Siempre en el ámbito del rock en oposición y del más exquisito avant garde, lleno de pasajes cargados a la música de cámara y secciones oscurísimas, Nazca se yergue como uno de los más avanzados proyectos musicales mexicanos y del continente.

FROLIC FROTH
Esta es una de mis dos bandas sicodélicas favoritas provenientes de tierra aztecas. Su disco debut Ouroboros (1996), es para mí una de las joyas musicales de los últimos veinte años. Si bien corre por sus venas un innegable sentido sicodélico, no es menos cierto que en sus rolas podemos encontrar influencias que van desde el avant garde hasta King Crimson, lo que hace de esta banda una delicia para los oídos.



CHAC MOOL
Otra de las joyas mexicanas de los 80 que tuvo un breve y exquisito regreso a comienzos de este siglo. En su formación, destacan dos grandes nombres de la música azteca como Jorge Reyes y Carlos Alvarado, en una banda que nos entrega mucha crítica social entramada en sinfónicas melodías en donde sobresale el trabajo en teclados y flauta traversa. Si bien sus placas son algo disparejas en cuanto a calidad, lo cierto es que la suma da como resultado uno de los sonidos más consistentes y propios del rock progresivo mexicano.

OXOMAXOMA
Otro de los brillantes ejemplos de lo que en México hacen los muchachines con el rock en oposición. Sólo tres discos entre 1990 y el 2002, todos ellos siempre pioneros, arriesgados y ferozmente experimentales. Para mí, aún no hay forma precisa de definir qué hacen estos cuates cuando se encierran en el estudio, pero quizás baste con decir que han jugueteado con toda la parafernalia electrónica imaginable, texturándola con sonidos extraídos de los más disímiles objetos de uso casero, obteniendo un resultado que es capaz de dejar en coma cualquier neurona...

HUMUS
Esta es mi segunda banda sicodélica mexicana de cabecera, aunque la verdad gran parte de lo que ustedes escuchen proviene del extraño cerebro del señor Jorge Beltrán. Otra vez, lo más granado de la sicodelia de los 70 se entrelaza con el prog y sonidos crimsonianos, pasando por espesas pero embriagadoras secciones instrumentales que desembocan en pasajes tan épicos como fantasmagóricos y fíjense que a pesar de las influencias, la verdad es que el sonido de Humus es el único que me atrevería a encasillas como verdadera y pura sicodelia mexicana.

CULTO SIN NOMBRE
Uno de los proyectos RIO más bizarros surgidos en tierras mayas. Músicos de bandas como Nazca y Decibel participaron de esta gloriosa ignominia musical que sacó sólo dos discos feroces e hipnotizantes. Una delicias para oídos hambrientos de nuevas sensaciones sonoras.

JOSÉ LUIS FERNÁNDEZ LEDEZMA
Otro de los más prolíficos creadores mexicanos, que desde 1996 nos ha regalado una interesantes discografía. Ex-integrante de Nirgal Vallis y actual cabeza de Saena, este teclero posee una de las mentes más dúctiles y eclécticas de Latinoamérica, paseándose con suma facilidad por varios géneros prog, pero es en sus temas y discos más sinfónicos en donde palpamos su tremendo talento. Un artista de tomo y lomo al que hay que ponerle muchísima atención.



EL PUENTE DE ALVARADO
¿Qué pasa cuando juntas integrantes de dos bandas trascendentales del rock mexicano como Chac Mool e Iconoclasta? Bueno, pues sale un discazo de aquellos en donde las tendencias del prog, el heavy, el hard rock, el jazz y el más puro folclor mexicano se unen para entregarnos una serie de rolas maravillosas, llenas de sabor, en algunos casos hasta furibundas y sobre todo, exquisitas musicalmente... Otra soberbia muestra de lo ilimitado que puede ser el rock azteca cuando juntas a varios de sus genios en una sola agrupación que es capaz de editar un disco de inmenso peso y potencia...

LOS NENA

En la página web de esta banda mexicana (o lo que queda de ella), se lee la siguiente historia acerca de su fundación primordial: "En el verano del 99, trasnochados en un bar de la ciudad de Nueva York que tiene fotos de músicos por todas las paredes, Daniel (Goldaracena) y Abel (Membrillo), fuera de sí, prometieron crear una banda nueva en el DF y brindaron por eso debajo de la foto de Tom Waits que es donde eligieron sentarse. Por otro lado aclaramos que Los Nena, tal como ese día, estamos muy por debajo de Tom Waits. Que esta coincidencia no se malinterprete".
¿Por qué tanta pleitesía para una banda que sólo sacó dos discos? Sencillamente porque los muchachos se la juegan con tino envidiable al momento de generar oscuras atmósferas en base a la improvisación característica del R.I.O., con algunos toques progresivos, la mezcla precisa con el sonido clásico del mariachi que envuelto por el capullo del rock, suena como una renovada pieza experimental.
Los Nena sacaron sólo dos discos, quizás sólo para algunos oídos más avezados, preparados a nuevas experiencias auditivas y sensoriales que los dejen con la boca abierta y el alma en un hilo. Rock, funk, noise, algunos toques de folk, ciertos atisbos de música electrónica, muchos acordes metaleros y el ineludible sonido mariachi forman parte de ambas producciones.

Sí, lo sé, se me quedaron varios fuera del listado... De hecho, hay algunos que ni siquiera tiene material en YouTube, pero trabajaré en eso y aceptaré todas sus sugerencias, pero espero que este breve repaso sirva a muchos para (re)descubrir parte importante no sólo de la música mexicana, sino que además de nuestro continente... Nos vemos, terrícolas...

12.15.2012

ESPECIAL DE NAVIDAD: Rare Exports Inc. (2003): Un bizarro corto navideño



El 2011, el finés Jalmari Helander se despachó un peliculón oscuramente navideño llamado en español Raras Exportaciones: Un Cuento de Navidad, una obra en donde la mitología navideña es reinventada a fuerza de suspenso, terror, buena foto y dosis de sangre. No les voy a contar la peli porque tienen que verla a como de lugar, pero sí les voy a dejar el corto del mismo director, hecho el 2003, que dio pie a esta tremenda peli. Que lo disfruten, terrícolas.


Cuando los Dinosaurios Gobernaban la Tierra XV

Gordon Giltrap - Visionary (1976)

Hablar de Gordon Giltrap es hablar de uno de los más destacados y eclécticos especialistas de la guitara acústica inglés de la segunda mitad del siglo XX aunque claro, su carrera es para la mayoría desconocida, convirtiéndose en otro de esos tantos talentos ignorados que flotan entre la pasión de pocos, un par de líneas que les han dedicado en internet y escasas menciones en el ámbito de la música.

Giltrap es contemporáneo a una extraordinaria generación de músicos británicos liderada por Mike Oldfield, Bert Jansch y John Redbourn que en los 60 se convirtió en parte fundamental del movimiento folk de la isla y que en los 70 comenzó a hacer gala de su eclecticismo en una época que por lejos, fue la más fructífera y alucinante de su carrera, con algunos discos en donde su pasión por la música clásica, las melodías medievales y las influencias progresivas conformaron inspiradas placas de alto vuelo musical, todas ellas compuesta con exquisito detalle, llenas de momentos ferozmente abrasadores y poseedoras de un sello único e invaluable a estas alturas de la historia.

Y es por eso que he querido rescatar para esta sección el que para mí, es su mejor disco. Visionary es un menjunje heterodoxo, plagado de influencias y texturas en una serie de 11 temas que no superan los 4.30 minutos (12 temas en la re-edición en CD), pero que dejan de manifiesto la ductilidad de Giltrap para pasearse por diversos géneros y sacar provecho de cada uno de ellos, no sólo para regalarnos su talento en la guitarra, sino que además para generar pequeñas suites llenas de deliciosos ornamentos y sentido épico.

Visionary abre con Awakening, una pieza de factura soberbia, elevada y rimbombante, que los amantes del Oldfield de los 70 no podrán dejar de comparar con algunas de las piezas de Mike de aquella época (aunque a mí me recuerda más al extraordinario Erwin Gutawa) y en donde ya nos conmovemos con el sólido uso que Giltrap hace acá de cuerdas y vientos y que se mezcla con la "goblinesca" Robes and Crowns. En seguida, con From the Four Winds nos introducimos en el sonido más puro de la guitarra de Giltrap con una melodía en tono de madrigal que hace la pausa necesaria antes de arribar a Lucifers Cage, donde nuevamente Giltrap aborda el sonido sinfónico característico de los 70 en una pieza que mezla, en pocos minutos, varios estilos que otra vez nos rememoran algunas pizas de Oldfield, pero con el sello del mismísimo Gordon.

En Revelation, otra vez los sonidos medievales hacen su aparición para regalarnos una pieza rítmica, suave y volátil, mientras que The Price of Experience retoma la senda en la que Giltrap se atreve a ahondar en el rock progresivo, con épicas arremetidas de vientos, cuerdas y sintetizadores. The Dance of the Albion es otra exquisita muestra de la ductilidad del músico al momento de tomar una guitarra acústica y navegar por aguas en donde plasma su gusto por el barroco, para luego abrir paso a The Tyger, una breve aunque precisa pieza que juega con armonías románticas y síncopes prog antes de la aparición de la delicada y elegante The Ecchoing Green. El disco termina con otro paseo por el barroco titulado London y otra pieza volátil, casi hecha para orquesta, suavemente pomposa y clásica llamada The Night.

En la edición de CD se agregó el tema On the Wings of Hope, otra de las piezas en clave épica que Giltrap trabajó maravillosamente durante la primera mitad de los 70, magistral cierre para un disco ignorado por muchos, lleno del talento de un músico y compositor que ha navegado por los más variados estilos y que entre otros, ha colaborado con John Etheridge (Soft Machine) y el mismísimo Rick Wakeman. Un álbum y una discografía admirable y recomendable por donde se la mire, pero de todo corazón, les recomiendo tener este álbum en su panteón personal de inolvidables rarezas progresivas.

El disco
1. Awakening (2:22)
2. Robes and Crowns (1:50)
3. From the Four Winds (3:32)
4. Lucifers Cage (4:11)
5. Revelation (3:25)
6. The Price of Experience (2:26)
7. The Dance of the Albion (1:57)
8. The Tyger (1:59)
9. The Escchoing Green (1:59)
10. London (3:03)
11. The Night (3:55)
Bonus Track:
12. On the Wings of Hope (3:12)

Los músicos
-Gordon Giltrap / guitarra
-Ron Edwards / teclados
-John G. Perry / bajo
-Simon Phillips / batería
Invitados:
-Shirlie Roden / voz
-Chris Mercer / saxo alto y barítono
-Jeff Daly / saxo barítono
-R.W. "Butch" Hudson y Henry Lowther / trompetas
-Chris Pine / trombón
-Tony Carr y Roger Hand / percusiones

Info del disco
Voiceprint LCVP114CD


12.08.2012

LAS PELÍCULAS QUE OLVIDAMOS: Las Cosas Cambian (1988)

En uno de aquellos cientos rotativos triples y hasta cuádruples que me tocó presenciar en el desaparecido Cine Gran Vía de Antofagasta (esos que uno terminaba muerto de hambre, con los ojos irritados y el culo acalambrado), me topé con esta pequeña obra maestra dirigida y co-escrita por el gran David Mamet. Y fíjense que la poca gente que conozco que ha visto esta cinta "menor", si se le puede llamar así, han quedado igual de encandilados que yo. Les voy a explicar por qué.

La historia es sencilla a más no poder, pero oculta ternura, emoción y humor a raudales: Gino (Don Ameche), es un zapatero ítalo-americano de rutinaria y tranquila vida. Un día cualquiera, se le acerca un capo de la mafia para pedirle pedazo de favor: que lo reemplace en un juicio por homicidio y pase un tiempo en la cárcel en su lugar. El premio, será cumplir el sueño más grande de Gino, tener un yate para recorrer el mundo. El zapatero acepta el trato y para asegurarse que no escape o se arrepienta, le destinan a un matón de poca monta llamado Jerry (Joe Mantegna) para que lo vigile durante el fin de semana previo al juicio.

Jerry es un delincuentillo con muchas aspiraciones, pero lamentablemente ni la inteligencia ni el valor lo acompañan demasiado. Es por eso que este "encargo" lo toma en un comienzo, de muy mala gana, pero a poco andar y en contraste con su personalidad, comienza a conocer a Gino, un viejo que parece no preocuparse por nada de lo que ocurre a su alrededor y cuya sabiduría popular supera cualquier paradigma científico y filosófico. Es así que, una vez encariñado con Gino, decide que en vez de estar encerrados en la zapatería oculta en pleno Nueva York, ambos pasen un fin de semana de ensueño en Las Vegas antes del día en que Gino deba ir a presentarse ante la justicia...

Lo que pasa de ahí en adelante, se los dejo a ustedes. Mantegna y Ameche forman una pareja actoral perfecta, una dupla que funciona como reloj suizo y era que no, dado que el film se sostiene sobre su interacción joven/viejo, instinto/razón, audacia/observación... Todo ello, por supuesto, aderezado por medidas dosis de inteligente humor al que Mamet nos ha acostumbrado en su filmografía e incluso, desde que se dedicaba exclusivamente al teatro. Los secundarios no se quedan atrás, y ofrecen un panorama delicioso de gringos mafiosos y por otra parte, de personajes humildes con los que uno, de una u ora forma, se encariña de inmediato.

A veces, da bastante bronca que no muchos recuerden películas como esta, sobre todo, cuando el Séptimo Arte, al menos el que adhiere al mainstream, se ha plagado de efectos especiales y humor escatológico. Es por eso que en ocasiones, se hace necesario un breve viaje en reversa para recordar films menores, pero no menos atractivos, como este, en donde personajes sencillos pero bien construidos y un guión sólido y coherente, logran dar forma a una comedia que después de verla, se te queda grabada para siempre en la retina... Personajes y guión, dos elementos tan básicos en la cinematografía , pero que tanto escasean hoy por hoy en nuestra cartelera comercial...

Things Change
1988
100 minutos
Dirigió David Mamet
Escribieron David Mamet y  Shel Silverstein
Música de Alaric Jans
Fotografía de Juan Ruiz-Anchia
Actuaron Joe Mantegna, Don Ameche, Robert Prosky y un reparto plagados de actores de la vieja guardia y otros que a partir de los 90, se hicieron bien famosillos.

De regalo, les dejo una secuencia de la película en donde aparece una aún joven y hasta ese momento desconocida Felicity Huffmann (Desperate Housewives)



12.07.2012

Cinco bandas húngaras que de seguro no conocías pero que debes escuchar

En fin, para seguir promoviendo los buenos gustos musicales, les dejo un breve listado de cinco bandas húngaras que a lo mejor no conocían, pero que son para ponerlas en el panteón de cualquier melómano... Deléitense...

1.- Barbaro - Almódban


2.- D Sound - Budafok


3.- Omega - Late Night Show



4.- Locomotiv GT - Es Jott A Doktor



5.- Attila Kollar - Silent's Man Prayer






Oreja con: Delusion Squared – II (2012)



El año 2010, esta banda ya me había impresionado agradablemente con su disco debut, cuyo comentario pueden revisar aquí, y ahora vuelven con su segunda producción, un disco que si bien puede no ser del total gusto de proggers o rockeros más recalcitrantes, se levanta para mi gusto, como uno de los más destacados estrenos del 2012.

Si bien no se aprecian muchas diferencias musicales y estilísticas en relación a su primera producción, lo cierto es que más allá de convertirse esto en un punto en contra, con el correr de los minutos se convierte en una característica favorable, debido a que el trío ahonda en la estética de su debut, otorgándole nuevas direcciones sin perder su esquema original, que navega entre pulsaciones de Porcupine Tree y The Gathering, pasando por una variada gama de géneros en donde estallan las atmósferas generadas por toques de guitarra acústica y los teclados escalofriantes de Emmanuel de Saint Meen, a lo que se suma una producción más que pulcra en estudio. Y quiero destacar este punto porque me parece que Delusion Squared es, a mi parecer, una de esas agrupaciones que produce y arma sus temas con un esmero casi maniático, hasta obtener versiones que suenan casi perfectas al oído, despertando emociones no sólo con la técnica de sus músicos, sino que además con un audio que se percibe hasta fastuoso.

Qué decir de los temas que confluyen en este álbum cuyas similitudes con su disco debut no son casuales, debido a que se trata de una especie se secuela, comenzando con las dos primeras canciones que forman parte del capítulo inicial del álbum, “Providence”. Se trata de Double Vision, una pieza de exquisita factura y en la que subyacen los elementos ya mencionados, además de un particular sentido progresivo, y Necrogenesis, un tema plagado de momento soberbios en los que, si bien hay momentos que musicalmente débiles, no es menos cierto que la hermosa voz de Lorraine Young es capaz de hacernos pasar por alto cualquier minucia de este tipo. El capítulo siguiente, titulado “Primordial Sin”, comienza con Faith Mission, tema que inicia como una delicada balada de ensueño para transformarse en pocos minutos, en una pieza oscura y potente. Recipe For Disaster es el tema que más nos puede recordar el sonido progresivo de las últimas décadas, con toques bastante clásicos del género, una composición más purista si se desea definir de esa manera y que abre paso a una balada delicada y flotante titulada Veridical Paradox.

Entramos así, a los últimos cuatro temas del disco: Revelation, Abduction (que forman parte de “Oblation”) para seguir con Naked Solipsism, que abre paso a la última parte del disco, “Atonement”. Aquí, los elementos y características que recorren el ADN de la banda quedan al descubierto nuevamente, con sensibles y emocionantes secciones instrumentales progresivas que irradian potencia, donde nuevamente la voz de Young se convierte en un factor fundamental para obtener atmósferas memorables, hasta llegar al magnum opus del disco, una pieza poderosa de ocho minutos titulada Unexpected Messiah, que cierra de manera brillante un discote de aquellos que se convierten en imperdibles y que nos dan muestra tangible del talento de un trío de músicos con una gran cantidad de influencias de las cuales son, sin dudas, capaces de extraer un estilo propio y singular que ojalá, no se quede sólo en estas dos potentes producciones.

La música
1. Double Vision (6:33)
2. Necrogenesis (7:01)
3. Faith Mission (6:39)
4.
Recipe for Disaster (7:55)
5. Veridical Paradox (4:10)
6. Revelation (7:26)
7. Abduction (5:43)
8. Naked Solipsism (6:00)
9. Unexpected Messiah (8:07)

Los músicos
- Lorraine Young / Voz y guitarras
- Steven Francis / Guitarra, teclados y batería
- Emmanuel de Saint Meen / Bajo y teclados

Info del disco
Independiente


12.06.2012

Ted (2012)... o la reafirmación del reinado cómico de Seth MacFarlane


Apenas supe que Seth MacFarlane estaba haciendo un largometraje, me dio algo de miedo. Y cómo no. Uno que ha seguido su carrera desde la primera temporada de Padre de Familia, que sufrió cuando la sacaron del aire, que se emocionó cuando regresó a la pantalla chica y que disfruta del plagio que hizo de sí mismo con American Dad y con el spin off Cleaveland Show, no podía sino esta preocupado porque no es lo mismo sostener ese particular, negro, desfachatado y abrasador humor por media hora que por más de una hora y media.

Pero MacFarlane, el “don” de la comedia por estos años, no defraudó. Junto a dos de sus socios en TV, Alec Sulkin y Wellesley Wild, logró armar un guión sencillo pero muy entretenido y ágil, que se sostiene en andanadas rápidas y constantes de humor más verbal que físico, muy inteligente en algunos momentos, coprolálico en otros, y hasta absurdo e irreverente en varios de los momentos más desternillantes de la historia de John Bennett (Mark Wahlberg), quien siendo niño pide tener como mejor amigo y para siempre, a su oso de peluche, Ted (voz de MacFarlane). Su deseo se cumple, pero el cuento de hadas de su infancia, con el paso de los años, se ha convertido en un lugar común que lo mantiene estancado en un trabajo poco exigente, pero con una novia espectacular a su lado, la bellísima Lori (Mila Kunis)... Y bueno, Ted aún es un ocho de peluche que apenas se encumbra a 60 centímetros del suelo, pero que carga ya más de dos décadas de vida en las que se ha convertido en un afelpado adulto lleno de vicios, humor displicente y sumamente despreocupado. Y si bien Lori está muy enamorada de John, ha llegado un momento en sus vidas en que el pasado debe ser dejado de lado para poder enfrentar juntos el futuro y para Lori, ese futuro, no incluye a Ted...

No me gusta como actúa Wahlberg, pero debo reconocer que da en el tono justo en este film, haciendo creíble no sólo su personaje, sino que también su relación con Ted. Cargado de tics ochenteros y noventeros, junto al oso protagonizan un par de secuencias inolvidables, entre ellas, el momento en que conocen a Sam Jones, el protagonista de la película Flash Gordon de la cual ambos son fanáticos, en una fiestoca de antología. Mila Kunis no lo hace nada de mal, siendo protagonista también de un par de momentos jocosos, mismos que van armando una seguidilla de secuencias llenas de detalles, en los que incluso, MacFarlane se ríe de si mismo y de sus personajes de televisión, además de burlarse de los judíos, negros, blancos, homosexuales, las tiendas de descuento, las grandes cadenas comerciales, la iglesia, el fútbol americano, la televisión y un largo etcétera, porque como bien sabemos sus seguidores, Seth y sus chicos no dejan títere con cabeza.

No me cabe duda que es la mejor comedia del 2012, no tanto por su originalidad, sino que porque MacFarlane y los suyos demuestran que la probada fórmula de sus series de TV sirve para la pantalla grande aplicando algunos sorpresivos giros y en especial, porque por la cantidad de gente que fue a ver la peli (la más taquillera de Universal este año y hasta la fecha), creo que son muchos más los fanáticos del bizarro humor de MacFarlane de lo que pensaba y eso espero que permita que podamos ver sus “obras de arte” por muchos años en las pantallas chicas y grandes...

Larga vida a Seth...

LA PELÍCULA
Ted
106 minutos
Dirigió Franco Copari
Escribieron Seth MacFarlane, Alec Sulkin y Wellesley Wild
Fotografía de Michael Barrett
Editó Jeff Freeman
Música de Lucas Scenna (aunque la banda sonora incluye a Norah Jones, Hootie & The Blowfish, Queen y el inefable Walter Murphy)
Actuaron Mark Wahlberg, Mila Kunis, Seth MacFarlane (voz), Giovanni Ribisi, Jessica Barth, Jessica Stroup, Joel McHale, Patrick Warburton y ojo, porque aparece una buena cantidad de conocidos haciendo de sí mismos...


12.04.2012

Cuando los Dinosaurios Gobernaban la Tierra XIV



Capability Brown – Voice (1973)

Me atrevería a decir que son miles las bandas británicas que han dejado alguna huella en el mundo del rock. Algunas, por sendos pedazos de discografía; otras por uno que otro álbum excepcional y algunas, hasta por una sola canción, y la verdad es que Capability Brown podría caer en esta última categoría, si no fuera porque hasta sus temas más finitos y poperos están bien hechos, al menos, en este, su segundo y último disco en una carrera corta pero que nos dejo una placa memorable en todo sentido.

Liderados por Tony Ferguson en voz, guitarra y bajo, y Dave Nevin, en voz, teclas, guitarra y bajo, la banda sacó un disco en 1972 que por décadas ha sido considerado intrascendente, aunque es bastante bueno, pero se convierte en un pelo de la cola al compararlo con el notable Voice, una placa que abre los fuegos con un cover de Affinity, I Am and So Are You, en donde ya destaca el impecable trabajo vocal que caracteriza las cinco canciones del álbum, en una revisión de un clásico que lo enriquece y le da un toque que navega entre el art rock y el pop de la época con increíble ductilidad, pieza que le abre el paso a la breve pero intensa Sad Am I.

En seguida, nos encontramos con otro cover glorioso. Se trata de Midnight Cruiser de los legendarios Steely Dan, en donde otra vez los juegos vocales se ponen al servicio de una interesante melodía y juegos rítmicos que comienzan a preparar el camino para la suite principal de este portento de álbum olvidado. Pero donde finalmente caemos en lo que pudo haber sido de Capability Brown de haber proyectado su carrera más allá de dos discos, es con la blusera Keep Death Off The Road, una elegante pieza rockera llena de matices y en donde por breves segundos, escuchamos algunos coros que perfectamente pudieron haber inspirado a Freddy Mercury y sus muchachos, que por eso años también hacían sus primeras armas... El tema es un viaje sonoro, liderado por los ya comentados juegos vocales, y un sólido solo de guitarra que completa una pieza que no te aburres de repetir.

Pero donde Ferguson, Nevin y sus muchachos se convierten en leyenda, es en la suite de poco más de veinte minutos titulada Circumstances, un fresco impresionante que mezcla diversas tendencias que a veces lindan con el fusion para viajar por retazos sicodélicos desde donde partimos a paisajes medievales antes de sustraernos a hermosas secciones sinfónicas. Notable interpretación que adquiere tintes de suma delicadeza con el trabajo vocal y que veces linda el heavy con trabajados solos de guitarra...

No les voy a contar más. Mejor disfruten de este disco un tanto olvidado de los 70, aunque para algunos es una pieza clave de la época y hasta de culto, lugar que se tiene bien merecido y una vez que lo escuchen, estoy seguro que muchos de ustedes estarán de acuerdo con ese rótulo que tanto cuesta ganarse en el panteón musical.

La música
1. I Am And So Are You (3:57)
2. Sad Am I (3:51)
3. Midnight Cruiser (3:58)
4. Keep Death Off The Road (Drive On The Paviment) (6:20)
5. Circumstances (In Love, Past, Present, Future Meet) (20:51

Los músicos
- Tony Ferguson / Voz, guitarra y bajo
- Dave Nevin / Voz, teclados, guitarra y bajo
- Kenny Rowe / Voz, bajo y percusión
- Grahame White / Voz, guitarra y bajo
- Joe Williams / Voz y percusión
- Roger Willis / Voz, batería y teclados

Info del disco
CD Charisma Virgin VJCP-2546


LAS PELÍCULAS QUE DETESTO: Rápido y Furioso (2001)

Recuerdo una época más gloriosa en el mundillo de las películas del subgénero de las tuercas y los motores. Por ahí me viene a la mente Calles de Fuego (1984), también la jocosa Cannonball (1981) y hasta las apocalípticas máquinas que nos heredó la siempre notable Mad Max (1979)... Llámenme nostálgico, pero la verdad es que Rápido y Furioso no tiene ningún elemento que me permita ver alguna de sus secuencias por más de tres minutos y menos, de sus secuelas.

No puedo negar que es un film hecho a medida y de total gusto de los fanáticos del tunning, porque más allá de su escasa trama, es un constante desfile de autos enchulados y secuelas de acción en donde lo único que destaca es el cuerpo y la mirada despectiva de Michelle Rodríguez, que aunque muy marimacha, todavía provoca escalofríos con cada aparición. Lo demás, es una trama simple a más no poder que sirve como excusa para un despliegue visual bien hecho, pero sumamente absurdo y aburrido: un joven policía llamado Brian O’Conner (Chris Walker) tiene como misión sumergirse en el mundo de Dominic Toretto (Vin Diesel, que sirve de gancho para que muchas féminas soporten la película), un ladrón profesional que participa de carreras ilegales a la vez que junto a un grupo de corredores bandidos, se dedica a los robos en carreteras y autopistas.

Con esa sencilla premisa, se desencadena una serie de competencias y persecuciones sin sentido, con un final más que predecible, en un film que sirvió de excusa para poner de moda el tuneo de vehículos... No sé ustedes, pero yo soy enchapado a la antigua, así es que creo que un auto no es más que medio de transporte y no una discoteque, al igual que los teléfonos sirven para hacer y recibir llamadas y nada más... Ahí, les aguanto cualquier crítica, porque en gustos no hay nada escrito, pero de ahí a comparar Rápido y Furioso con aquella gloriosa película de acción llamada Punto de Quiebre, hay un trecho largo, insalvable e imperdonable para quienes osen comparar ambas cintas.

RyF no es más que un producto en serie sin sabor, ni contenido, destinado a un público específico en esta y todos sus otros capítulos; un bodrio que en ocasiones más parece una larga secuencia del juego Need for Speed más que un film, plagado de frases cliché, actitudes machistas y "actrices" de adorno; un desperdicio de dinero que si bien es un gran distractor para el público ahíto de acción descerebrada, no es más que una suma de lo más selecto de lo pero del cine gringo reunido en 90 minutos de incoherencias que no suman ningún aporte al vapuleado séptimo arte del gran hermano del norte que cada vez, parece dar más pasos para atrás que para adelante al menos en cuanto a la gran industria de Los Ángeles se refiere... Eso, sin contar con una externalidad negativa al menos en Chilito: la aparición de centenares de "rápidos y jugosos" que malamente inspirados en la película han enchulado sus autitos de formas bastante tercermundistas... Horror de horrores...

LA PELÍCULA
The Fast and The Furious
Dirigió Rob Cohen
Escribieron (?) David Ayer, Eric Bergquist y Gary Scott Thompson
Fotografía de Ericson Core
Editó Peter Honess
Música de BT
Actuaron Mitsubishi Eclipse, Mazda RX-7, Nissan Skyline, Honda S2000, Volkswagen Jetta y algunos humanos como Vin Diesel, Chris Walker, Michelle Rodríguez, Jordana Brewster, Chad Lindberg y Johnny Strong...


12.03.2012

Oreja con: Pinkroom - Psychosolstice (2009)


Tres años se pasan volando. Y es por eso que pareciera que fue ayer que escribí el último comentario de cine o música en este blog que tenía totalmente abandonado y como tampoco nunca es tarde para nada, decidí volver a las pistas comentando este álbum que leva un par de semanas dando vueltas en mi teléfono, acompañándome de ida o de regreso a casa. Se trata de un proyecto polaco llamado Pinkroom que, si bien está cargado de influencias, de todas maneras debiera muy bien para cualquier asiduo del rock.

La banda es un proyecto que nace de las heterodoxas mentes del batero Marcin Kledzik y del multiinstrumentista Mariusz Boniecki quienes hace unos años, cuando era unos pendejos de secundaria, fundaron el grupo Empty Room, para dar rienda suelta a sus intereses musicales. Años después volvieron a encontrarse y se dieron cuenta que el bichito de la música todavía los tenía envenenados, así es que decidieron fundar un nuevo proyecto que fue el que parió el que hasta ahora, es su único disco, temerariamente titulado Psychosolstice, allá en el año 2009.

Por ahí, hay algunos que han encasillado a este dúo polaco bajo el rótulo del art rock; yo, más bien me quedo con ese sabor crimsoniano que recorre la mayor parte de sus temas, aunque a diferencia de otras bandas que han adherido a la fe de Mr. Robert Fripp, estos chicos se colgaron del King Crimson ochentero, además de involucrar sonidos y pasajes que innegablemente nos inducen a la gala variada de atmósferas que marcan los discos de Porcupine Tree. Con estos dos antecedentes, ya hay material suficiente para hacerse una idea de los fantásticos pasajes de superficial quietud que rompen en éxtasis musicales potentes y hasta pesados, donde prevalecen complejos pasajes en guitarra, sumados a secciones instrumentales difíciles de desentrañar, momentos volátiles y momentos sinfónicos que hasta nos llevan a zonas que colindan con el metal, especialmente relacionadas con Dream Theater y sus coterráneos de Riverside.

Pero más allá de las comparaciones, que quizás sólo sirvan para dar cierta idea de lo que ustedes encontrarán en la plaza, lo cierto es que el disco tiene un sabor bastante singular y aunque hay temas en donde las mencionadas influencias se hacen notorias, la verdad es que aún así, cada pieza es una joya por si sola, partiendo por Path of the Dying Truth, Buried Hopes, Curse y Days Will Should Not Be, los más eclécticos del disco, mientras que por otra parte, aparece la crimsoniana suite formada por las dos partes de Moondroom (una de ellas aparece como bonus en la edición especial del disco) para dejar en otra categoría, piezas como Stonegarden, Quietus, Zam y Recognized, quizás las más personales del grupo que para concretar este magnífico disco, se hizo acompañar de varios amiguitos igual de buenos para tocar y pelar l cable en esta misma, extraña y apasionante sintonía.

Nada mal pata un disco debut que encanta y hasta por momentos, hipnotiza por lo que uno de verdad espera que no sea el último...

La música
1. Path Of Dying Truth (7:20)
2. Buried Hopes (3:54)
3. Dispersion (5:24)
4. Quietus (5:30)
5. Zam (6:26)
6. Curse (7:42)
7. Moodroom v.2 (4:37)
8. Stonegarden (6:46)
9. Days Which Should Not Be (6:25)
10. Recognized (2:40)

11. Moondroom v.1 (Bonus track) (6:01)

Los músicos
- Mariusz Boniecki / voz, guitarra, teclados y samples
- Marcin Kledzik / batetría y percusión
+
- Kacper Ostrowski / bajo
- Mikolaj Zielinski / voz (1)
- Anna Szczygiel / cello (7,9)
- Maciej Feddek / guitarra (9)

Info del disco
CD Creative Farm (2009 POL)