Me equivoqué. Transformers 2 no éstá llena de efectos especiales, está saturada de ellos. Y no tiene poco contenido, la verdad es que no tiene ninguno. Es sorprendente saber que Michael Bay, su director, tomó la historia escrita por tres bellacos que, la verdad, no alcanzan para uno. Se trata de un guión tan incocente y sencillo que linda con la estupidez, entre explicaciones sumamente absurdas y chistes un tanto subidos de tono, con un desenlace a lo menos obvio y personajes que no alcanzan si no a ser carticaturas entre robots generados por computadora y secuencias de acción extensas y aburridas.
Una de las gracias de Transformers 1 era la endeble aunque justificada búsqueda del joven Sam Witwicky (Shia LeBeouf) de su personalidad, de afirmarse en el paso de la adolescencia a la juventud y encontrarse repentinamente en medio de una guerra intergaláctica, como único medio y llave para resolver el entuerto. En esta ocasión, aquel heroísmo forzado se vuelve a repetir (era qué no), otra vez en compañía de su polola Mikaela (la regia pero inexpresiva Megan Fox) cuando encuentra entre su ropa un trozo del Cubo que da vida a cualquier objeto electrónico, convirtiéndolo en un Transformer. Ahora, se trata simplemente del regreso de Fallen (voz de Tony Todd), quien en un comienzo busca esta pieza, pero que después devía su atención hacia el hallazgo de una poderosa arma de destrucción total, cuyo mapa se halla en la mente de Sam luego de haber tocado la astilla del Cubo. Así, Autobots y Decepticons se ensalzan nuevamente en una lucha sin cuartel por encontrar esta arma, recorriendo no sólo Gringolandia si no que también Francia y Egipto, en donde se produce la latera batalla final.
Se repiten algunos personajes de la primera entrega, como Lennox (Josh Duhamel) y los padres de Sam (Kevin Dunn y Julie White), quienes protagonizan algunas de las secuencias realmente divertidas de la película. Pero al final todos parecen desechables, incluso la estupenda Megan Fox que parece estar de adorno y siempre posando como para calendario, bajo la atenta mirada de Bay que cuida hasta el más mínimo detalle de foto al momento de ponerla en pantalla, tratando de convertirla en un producto sexy, pero despreocupándose completamente de su actuación porque, digámoslo, la chica tiene menos carácter que Optimus Prime (voz de Peter Cullen) y el odioso Megatron (voz de Hugo Weaving), los eternos enemigos que llegan a ser insufribles de tan bueno-bueno que es uno y malo-malo que es el otro... Ok, se trata de una película destinada a público infantil y adolescente, pero que no por eso es menos pensante y precisamente ahí radica el error de Transformers 2, en creer que el público es estúpido...
A lo mejor lo es. En un par de semanas la cinta ha recaudado más de 400 millones de dólares. Me imagino que se debe al ansia irrefrenable de las nuevas generaciones de ver la pantalla grande llena de efectos especiales que, en lo personales, me provocaron mareos y náuseas. Quizás estoy enchapado a la antigua, pero la verdad es que me resulta preocupante que tipos como Michael Bay, que si bien ha realizado películas de acción relativamente dignas, intente tapar un guión horroroso con toda la maquinaria tecnólogica que está a su alcance y que puede pagar sacándole plata al "Midas" Jerry Bruckheimer de los bolsillos. Y cómo lo que parece interesarles es superar constantemente la barrera de lo increíble en materia de generar imágenes por computador, la verdad les interesa un carajo armar una historia coherente y digna si el espectador bobalicón promedio asistirá en masa a las salas de cinea ser testigo de un desperdicio mundial de dinero y codiciosas intenciones.
Bien, si les gustan los efectos especiales hasta que las pupilas se les pongan cuadradas, Transformers 2 es su tipo de película. Si no, evítense perder dos horas de sus vidas en el cine. Si quieren ver a una mina rica sucia, bronceada y transpirada, por supuesto que gozarán con esta peli. Si para usted un buen film va más allá de ver cada tres minutos un par de pechugas adorables y un trasero nice, no le recomiendo este bodrio de 200 millones de dólares que al parecer, está destinado simplemente a la entretención más básica y sin sentido...
Antes de despedir esta nota, creo que válido acotar algo muy destacable: la edición de sonido de la peli es fantástica... De todas formas, hay que reconocer que entre tanta porquería, hay algo que reconocerle a este espantoso ejemplo de película...
LA PELICULA
Tranformers: La Venganza de los Caídos
(Transformers: The Revenge of the Fallen)
Dirigió Michael Bay
Produjeron Lorenzo Di Bonaventura, Ian Bryce, Tom De Santo y Don Murphy
Escribieron (?) Robert Orci, Alex Kurtzmann y Ehren Kruger
Fotografía de Ben Seresin
Editaron Roger Barton, Paul Rubell, Joe Negron y Thomas Muldoon
Música de Steve Jablonsky y Linkin Park
Actuaron Shia LeBeouf, Megan Fox, Josh Duhamel, Kevin Dunn, Tyrese Gibson, John Turturro, Ramón Rodríguez y Matthew Marsden, entre otros que no aportan nada a la trama. Voces de Peter Cullen, Hugo Weaving, Tony Todd, Jess Harnell, Robert Foxworth, Charlie Adler y Frank Welker, entre otros que si hicieron una pega decente...
2 comentarios:
la pelicula esta basada en dibujos animadoa para niños,cuando era niño yo (hace 20 años) que esperabas amargado? casa blanca? podrias agarrar una pistola y matarte... es un buen consejo
Don Anónimo... No estoy en contra de los efectos especiales ni de su uso. Si estoy en contra del ABUSO y me parece que en Transformers 2, hay abuso. Sí, soy un viejo de mierda que prefiere buenos guiones en vez de toneladas de mierda visual. Para efectos, contratas a técnicos, boludo. Pero anda a conseguirte un buen guionista... Lo de la pistola lo he pensado, huevón, muchas veces, pero quiero seguir vivo para marcar mi territorio en cuanto a cine se refiere y hacer algo constructivo como escribir comentarios y leer respuestas weonas como la tuya que simplemente demuestran mi teoría...
Publicar un comentario