Tardes en el Rex: FUERZA SINIESTRA (1985)

El encanto de ver películas B en un cine B

Así como mi compadre Muñoz Cazaux tenía su cine de pueblo en Coquimbo, yo (y muchos otros) teníamos aquí en Antofa un símil bastante cercano. Se trata del legendario Cine Rex, que estaba ubicado en calle Copiapó, entre Lord Cochrane y Blanco Encalada, y que hace algunos años fue demolido para convertirse en la ampliación de un colegio católico (Vaya formar de matar recuerdos).

Me parece que en cada ciudad de Chile hay o hubo una sala con ese nombre, y estoy seguro que todos los fanas del cine pasaron más de un día encerrados ahí, viendo interminables rotativos triples que en el caso del “mi” cine Rex, mezclaban pelis como Delito en la Playa del Vicio (Hubert Frank, 1977) con Busco mi Destino (Peter Fonda, 1969), para rematar con Robocop (Paul Verhoeven, 1987), en una amalgama que por esos años encontraba genial. Claro está que como buen cien de barrio, viejo, algo podrido, hediondo a pichi de gato y con palomas volando sobre tu cabeza, las copias de las películas eran de escasa calidad. Entonces, había segundos desaparecidos, problemas de audio, imágenes borrosas, muchos pelos y hoyos en el celuloide… en fin, todo buen y necesario elemento decorativo que inunda la imaginería de una contundente película de cine de barrio, vista a través de los ojos de un niño más interesado en la aventura misma de penetrar aquella sala que en la película en sí.

El asunto es que una de esas tardes, a mitad de semana, partimos al cine Rex que por esos tiempos cobraba 300 pesos la entrada y nos instalamos a ver películas, acompañados de bebidas tibias (probablemente Fanta Sol o Fanta Frut) y esos paquetes de papas fritas en bolsa plástica, aceitosa y transparente, sin marca. Y nos encontramos con Fuerza Siniestra, dirigida por Tobe Hopper que entre sus logros como director de filmes de terror, tiene a su haber Poltergeist (1982), la original Texas Chainsaw Massacre (1974) y Salem’s Lot (1979), una terrorífica miniserie que en Chile transmitió TVN con el nombre de La Noche del Vampiro y que mis contemporáneos deben recordar porque les quitó el sueño por varios meses.

La peli es mas inglesa que gringa, de hecho parte con el viaje del transbordador Churchill al espacio, en busca del cometa Halley para tomar muestras y datos. Los flemáticos astronautas británicos se encuentran con una nave alienígena que viaja como rémora en la cola del astro y parten a investigarla, encontrándose con tres féretros de cristal que contiene a dos hombres y una mujer completamente desnudos y nada más…

De regreso a la tierra con los ataúdes, pierden contacto con la base. Al aterrizar, sólo el comandante Carlsen (Steve Railsback) ha sobrevivido y es testigo, junto a un grupo de doctores y militares de la verdadera faz de los extraterrestres, que succionan la fuerza vital de sus víctimas, convirtiéndolas en “zombies-vampiros” que en menos de dos horas deben extraer la fuerza vital de otra persona para sobrevivir, convirtiendo a su víctima en un nuevo “zombie-vampiro”.

A pesar de las críticas negativas que recibió en su estreno y que fue un fracaso de taquilla, la peli es un pastel de comienzo a fin. Partiendo por la manía de Hopper de convertir todo en un desastre absoluto, brindándonos una apocalíptica visión de Londres arrasada por zombies-vampiros, buenas dosis de erotismo a cargo de Mathilda May en el rol de la mujer-vampiro-E.T. que se pasea en pelotas casi toda la peli, y por supuesto, memorables secuencias gore entre las que destaca la primera víctima que cobra la May en una especie de quirófano. Una de esas pelis de terror y sci fi que te mantienen pegado al asiento por dos horas, con sobresaltos incluidos, buenos efectos especiales y una mezcla irracional de géneros y giros sorpresivos que no pueden sino darse en las pelis de Hopper y de algunos otros adelantados y disparatados realizadores.

Algo de trivia, bastante necesaria por lo demás: Uno de los guionistas de este film es el legendario Dan O’Bannon, autor de entre otras imperdibles pelis, de Dark Star (John Carpenter, 1974) y Alien (Ridley Scott, 1979). La producción fue de Yoram Globus y Menahem Golan que en los 80 ganaron millones con películas de bajo presupuesto protagonizadas por Chuck Norris. Steve Railsback, el protagonista, hizo dos de los más notables y legendarios capítulos de Los Expedientes Secretos X, en el rol del abducido Duane Barry, y Mathilda May, si bien ha hecho gran parte de su carrera en Europa, puede ser recordada por algunos cinéfilos en el rol de Isabella Zancona en la nueva versión de El Chacal (Michael Caton-Jones, 1997)… En esta peli, ella es una sufrida ex militante de la ETA y amor imposible de Richard Gere…

De verdad, traten de conseguírsela. Es una locura de film, muy en la onda desenfrenada de Tobe Hopper y muy superior a otras cintas quizás mejor marketeadas o “normales” del mismo género. Les aseguro que no se arrepentirán…

FICHA TECNICA
Fuerza Siniestra (Lifeforce)
1985
116 minutos
Dirigió Tobe Hopper
Escribieron Dan O’Bannon y Don Jakoby, basado en la novela homónima de Colin Wilson
Produjeron Yoram Globus y Menahem Golan
Música de Henry Mancini

Actuaron Steve Raisback, Mathilda May, Peter Firth, Frank Finlay, Patrick Stewart, Michael Gottard, Nicholas Ball y cientos de zombies-vampiros...